Los beneficios del pastoreo en Andalucía son evidentes. Sin los pastores, el sector de la carne de cabra y oveja carecería de sentido. Ya trabajen en pequeñas cooperativas, de forma independiente o como parte de grandes estructuras, los pastores son vitales para que la industria cárnica pueda ofrecer productos de calidad.

¿Cuáles son los beneficios del pastoreo para la tierra andaluza? Son numerosos, ya que la actividad de los pastores implica cuidar la vegetación, aprovechar los recursos naturales y agrícolas y redistribuir semillas por grandes áreas, gracias a la migración estacional de los animales. Sin embargo, los numerosos beneficios del trabajo ancestral de los pastores no acaban ahí.

Pastoreo en Andalucía

Los beneficios del pastoreo para el entorno rural andaluz son variados. Sin embargo, primero es necesario entender la situación actual en lo que respecta al pastoreo en nuestra comunidad.

Rebaños pequeños

La mayoría de los rebaños de cabras y ovejas en Andalucía se encuentran repartidos en pequeñas explotaciones, y aunque se trata de un trabajo ancestral y muy exigente, todavía hay pastores decididos a mantener sus rebaños día tras día. Con razas destinadas a la producción de leche o carne, la mayoría de estos pastores trabaja diariamente para mantener bien alimentadas a sus cabras y ovejas.

Beneficios del pastoreo cooperativo

Algunos de estos pastores están organizados en cooperativas. Se unen para potenciar los resultados de su esfuerzo diario, contratando personal administrativo y otros trabajadores que los apoyan en el proceso de compra y crianza de animales, y en la venta de subproductos como leche o carne; algunos incluso elaboran sus propios quesos.

Pastoreo sostenible, beneficioso para el medio ambiente

Los beneficios del pastoreo sostenible se reflejan en el entorno. Los pastores no solo obtienen valor de su propia ganadería vendiendo leche, lana o carne; también mantienen vivo un ciclo natural. Crían razas autóctonas, así como razas en expansión, lo que los convierte en importantes contribuyentes a la sostenibilidad de los ecosistemas naturales. El pastoreo sostenible significa aprovechar al máximo los recursos que ofrece el entorno natural y ayuda de diversas maneras, como se describe a continuación.

Impulso a la economía rural a través del pastoreo

Los beneficios del pastoreo pueden observarse en la economía rural. Los pastores han dado vida a nuestras montañas, campos y pastizales desde tiempos inmemoriales. Sin embargo, el valor que aportan rara vez se asocia con factores económicos. Si no lo supiéramos, podríamos pensar que los pastores venden su leche a grandes marcas lácteas o que esquilan sus ovejas cuando conviene a la industria textil. Aunque algunos pastores sí trabajan de este modo, la economía rural y el pastoreo se potencian mutuamente. Cádiz, con su cabra Payoya local, es una zona particularmente interesante de España donde el mundo del pastoreo y la cabra se ha fusionado con la economía de los pueblos que conforman la región. Los quesos Payoya se curan de diferentes formas, y su variedad y calidad son sobresalientes. Tanto en pequeñas como en grandes explotaciones, se sirve a negocios costeros que a su vez venden sus productos a locales y turistas. Esta pequeña economía circular genera riqueza para la región.

Alimentación del ganado mientras se beneficia el entorno

Uno de los beneficios del pastoreo radica en la alimentación del ganado. Con una base alimenticia compuesta por hojas bajas, arbustos y residuos agrícolas, las cabras y ovejas renuevan el ecosistema. Primero, eliminan malas hierbas y subproductos agrícolas que pueden arder en periodos de sequía. Segundo, ayudan a diseminar diferentes semillas, fomentando las plantas autóctonas y su continuidad en el entorno. Esta labor solo es posible gracias al cuidado de los pastores, que, con la ayuda de sus perros, son capaces de gestionar adecuadamente sus rebaños.

El pastoreo nos beneficia con productos de calidad

Uno de los beneficios más destacados del pastoreo es la calidad añadida. Tanto en rebaños pequeños como grandes, la alimentación de los animales y su rutina diaria convierten la leche, la carne y la lana en productos de alta calidad demandados en todo el mundo. Esta actividad, llevada a cabo en una zona remota en las montañas de Málaga, genera productos buscados globalmente gracias a su inconfundible calidad. Estos procesos de producción tradicional, arraigados en el mundo rural, dan lugar a una excelente gama de productos alimentarios y textiles.

Los beneficios del pastoreo en el ecosistema

Desde su forma de alimentarse hasta la producción de estiércol, cabras y ovejas contribuyen de manera absolutamente positiva al entorno. Son capaces de despejar y clarear un bosque en invierno para prevenir su combustión en verano, pero también de generar estiércol natural para perpetuar la compleja cadena de procesos naturales que mantienen el ecosistema en el mejor estado posible.

Prevención de incendios forestales para mantener los ecosistemas

Los incendios forestales se previenen asegurando que el bosque esté adecuadamente despejado en invierno por los distintos rebaños de la zona. Cuando comienza el verano, las hierbas bajas y resecas —que son el alimento ideal para cabras y ovejas— quedan a merced de las llamas estivales en caso de negligencia humana. Es este tipo de hierba la que hace que las llamas se propaguen más rápidamente, dificultando enormemente el trabajo de los equipos de extinción en tierra o aire.

Indudablemente, los beneficios del pastoreo pueden servir de guía cuando se trata de repoblar esa llamada “España vaciada”. Promover uno de los oficios más antiguos con ayuda de la tecnología es el camino a seguir. Con el apoyo de las administraciones locales y mediante el emprendimiento en entornos rurales, el pastoreo puede ser parte esencial de la economía de los pueblos. Con razas autóctonas e importadas capaces de adaptarse a una amplia gama de climas y paisajes, pueden promover esta antigua ocupación.